Unidad de Oftalmología Pediátrica
La visión es fundamental para el desarrollo intelectual y emocional del niño o de la niña.
La visión es fundamental para el desarrollo intelectual y emocional del niño o de la niña.
El niño puede presentar enfermedades similares a las del adulto u otras propias de la edad infantil. Detectar el ojo gandul (ambliopía), el estrabismo y enfermedades congénitas, entre otras, es uno de los objetivos de esta unidad.
La vigilancia de bebés prematuros es también de gran importancia, ya que permite detectar y tratar de manera exitosa la retinopatía de la prematuridad.
En la atención de los niños trabajamos de modo muy estrecho, oftalmólogos y optometristas especializados. En nuestra clínica contamos con un área específica para los niños situada en VERTE 2 (Vía Augusta 48), pensada para su comodidad y bienestar.
Especialistas en oftalmología infantil: Ponemos especial atención a los problemas de aprendizaje de los niños
La Unidad de Oftalmopediatría cuenta con la participación de un equipo de oftalmólogos pediatras y optometristas que en conjunto ayudan a cuidar el desarrollo y comportamiento visual de los pacientes pediátricos.
¿Qué se estudia y se trata?
- Refracción Pediátrica (bajo gotitas ciclopléjicas): para el diagnóstico, el control, la corrección y el seguimiento de los tres trastornos de la refracción: miopía, hipermetropía y astigmatismo.
- Alteración del reflejo pupilar
- Ojo vago (conocido técnicamente como ambliopía)
- Estrabismo , de tipo constante o intermitente, que se presenta como una desviación de la alineación de los ojos
- Obstrucción Congénita de vía lagrimal: con su diagnóstico y posible tratamiento.
- Patología de los párpados congénita o adquirida: como la ptosis (párpado caído), los orzuelos/chalación, la blefaritis (inflamación del borde del párpado, frecuentemente con caspa en las pestañas)
- Catarata Congénita o secundaría de la infancia (traumáticas, inflamatorias o infecciosas).
- Patologías de la córnea: queratocono, lenticono, astigmatismos irregulares progresivos, astigmatismos asociados a conjuntivitis alérgica, vernal u atópica.
- Problemas oculares asociados a la Prematuridad o antecedentes de haber tenido un Embarazo de riesgo (como hipertensión arterial de la madre, preeclampsias, diabetes gestacional, etc.)
- Patología hereditaria o congénita de la retina: diagnóstico y seguimiento.
- Traumatismos.
10 Consejos oftalmológicos para el cuidado de tu bebé:
Se recomienda hacer la primera revisión oftalmológica pediátrica a partir de los 3 años de edad. Sin embargo, se puede valorar antes de esa edad si el paciente tiene antecedentes personales o familiares o si los padres o el pediatra sospechan de alguna patología ocular.
- Si en tu familia existen antecedentes oftalmológicos como estrabismo, uso de gafas, ojo gandul y especialmente graduaciones muy diferentes entre los dos ojos, la revisión debe ser antes, sobre los dos años.
- Existen muchos mitos en oftalmología pediátrica que conducen a la preocupación de los padres, por lo que te aconsejamos que también nos visitéis para recibir una educación profesional en el cuidado ocular de tus hijos.
- Existen enfermedades que se desarrollan durante el embarazo que pueden afectar el desarrollo visual de tu bebé, al igual que si fue prematuro, por lo que es recomendable su valoración por oftalmología pediátrica para vigilar su adecuado desarrollo visual. Si tu bebé ha sido prematuro, hay más probabilidades de tener problemas oftalmológicos. Te quedarás más tranquilo/a si le llevas pronto al oftalmopediatra.
- Si notas en tu bebé la sensación de que desvía los ojos o si el pediatra lo sospecha a partir de los 4 meses de vida, es recomendable que lo revisemos en nuestras consultas de oftalmopediatría para un diagnóstico correcto o un control.
- El lagrimeo del bebé es muy frecuente en diferentes situaciones como irritaciones, infecciones o alergias. Pero también puede deberse a una sospecha de obstrucción de vía lagrimal o algo de mucha mayor gravedad como el glaucoma congénito. Por lo que te recomendamos que nos visites en nuestras consultas de oftalmopediatría para estar seguros del origen del problema lagrimal.
- Si tu hijo o hija tiene los ojos rojos, picor, escozor, tiene orzuelos o parpadeos continuos (como tics faciales), es recomendable una valoración oftalmológica de su graduación bajo cicloplejia porque puede estar asociado a defectos refractivos o necesidad de gafas.
- Un niño o niña que guiña un ojo o que tuerce la cabeza al mirar puede tener un problema visual importante.
- Si un niño con una enfermedad ocular crece, podemos llegar tarde para curarlo y poder recuperar su déficit visual.
- A veces un ojo sano con visión perfecta puede enmascarar el trastorno visual del otro ojo.
¡Y recuerden, papás!:
No toda patología ocular pediátrica se manifiesta con síntomas visibles, es importante un primer contacto con un oftalmólogo pediatra para comprobar que las visiones de los niños se estén desarrollando de la mejor manera posible.