Los quirófanos de cualquier especialidad deben permanecer con temperaturas fresquitas. El calor favorece el crecimiento de los microorganismos por lo que mantenemos siempre las salas quirúrgicas en la temperatura idónea. Pero no se preocupe, en todos los casos abrigamos a los pacientes todo lo que sea necesario con mantas muy confortables.
La sala de Láser Excímer (LASIK) es aún más fría (17-18ºC) para que las condiciones del láser sean óptimas. En este caso la operación es muy corta ( 10 minutos dentro de la sala) y con una buena manta ningún paciente ha de pasar frío. Los que si que hemos de ir bien abrigados somos los miembros del equipo (cirujano refractivo, enfermera instrumentista y técnico optometrista del láser) porque las sesiones pueden ser largas.