En general puede descansar o dormir tumbado boca arriba o de lado, siempre sobre el ojo no operado. En según que intervención quirúrgica será recomendable dormir semi-incorporado para evitar la inflamación. En la mayoría de los casos el ojo se protege con una pieza plástica a modo de escudo para que el ojo no sufra ninguna presión.
En las operaciones de desprendimiento de retina con gas intraocular la postura puede ser especial y deberá ajustarse a lo que el cirujano de retina le haya explicado a los familiares y que constará en el informe que le han entregado al salir de la clínica.
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