¿Por qué tengo ojo seco?

Durante la última década, los humanos hemos experimentado cambios en nuestro estilo de vida y en nuestro comportamiento en general debido al drástico avance tecnológico. Como consecuencia de este avance, hay una creciente presencia de dispositivos electrónicos en nuestra vida diaria y en nuestro ámbito laboral.

Gracias a recientes investigaciones se ha demostrado que el tiempo que pasamos frente a una pantalla está estrechamente relacionado con el aumento de la miopía en nuestra sociedad, pero esta afección no es la única consecuencia que debemos tener en cuenta ante el uso prolongado de estos dispositivos móviles, tabletas u ordenadores.

La Fatiga Visual Digital (FVD)

La FVD - Fatiga visual Digital - son las siglas de molestias oculares que puede provocar el uso diario y prolongado de dispositivos digitales, cuyos síntomas suelen aparecer a las 2 h seguidas de mirar la pantalla.

Según las estadísticas, un 30 % de los adultos pasan más de 9 horas seguidas delante de una pantalla (ordenador o móvil) y un 90 % no comenta sus molestias oculares con un profesional por pensar que no tienen solución. A pesar de esta creencia, existen ciertas medidas que podemos llevar a cabo para minimizar el impacto que tiene el uso de pantallas a nuestra salud ocular.

¿Por qué sentimos molestias oculares ante la exposición de pantallas?

La lágrima que cubre la superficie ocular está compuesta por tres capas: la primera que contacta con la córnea es de características mucosas y permite la adherencia de la lágrima. La segunda, la intermedia, está compuesta por agua, proteínas y otras importantes moléculas. La tercera, en contacto con la superficie aérea, está formada por lípidos y se encarga de evitar que la lágrima se evapore.

Con el uso intensivo de pantallas se puede producir una alteración en alguna de estas capas y aparecer síntomas como sequedad ocular, dificultad para enfocar, ojos rojos e irritados, dolor de cabeza, sensación de arenilla, lentitud al enfocar y ojos llorosos, entre otros.

¿Cómo afectan los dispositivos electrónicos al ojo seco?

• Alteración del parpadeo: Cuando hacemos uso de dispositivos electrónicos, ya sea teléfonos móviles, ordenadores o tabletas, los ojos cambian constantemente de dirección y de enfoque, por lo que solemos parpadear con menos frecuencia y de manera incompleta. Sin un parpadeo adecuado, la lágrima no se reparte de forma uniforme por toda la superficie del ojo, de modo que se produce una alteración en la superficie ocular. A mayor tiempo de exposición al aire ambiental mayor la evaporación, especialmente si la capa lipídica es deficiente.
   
• Mayor apertura ocular por la disposición de la pantalla: Si cuando trabajamos con el ordenador la pantalla se encuentra por encima de la altura de los ojos, necesitamos una apertura mayor de los párpados para visualizarla. Por ello, es importante que la altura de la pantalla esté a unos 15 grados por debajo de la horizontal de los ojos.
   
• Sequedad en el ambiente. Especialmente en invierno, pasamos más tiempo en interiores, como por ejemplo en la oficina, y a causa de la calefacción se reseca el ambiente y se produce un aumento de la evaporación de la lágrima. Por otro lado, las pantallas son una fuente de luz proyectada, por lo que elevan la temperatura de la superficie ocular, también provocando un incremento en la evaporación de la lágrima. Una evaporación temprana de la lágrima contribuye a la aparición del síndrome del Ojo Seco.
   
• Mayor tiempo de lectura y de visualización de redes sociales. En la última década, se ha producido un aumento significativo del tiempo que dedicamos a las redes sociales y, por tanto, un incremento considerable de consumo de dispositivos electrónicos. 

Por otro lado, cabe recordar que para evitar la Fatiga visual Digital (FVD) es muy importante mantener una buena postura al estar frente del ordenador con la espalda recta y la pantalla entre 40 cm y 60 cm para evitar el dolor en el cuello-hombros-espalda que pueden dar como resultado cefaleas y migrañas. Asimismo, debemos asegurarnos de revisar nuestra vista ante la posibilidad de tener pequeñas graduaciones no corregidas, ya que pueden ayudar a la fatiga visual y aumentar la irritación visual.  

 

Pide cita en caso de presentar síntomas de Ojo Seco

En el caso de presentar síntomas como escozor, sensación de cuerpo extraño, lagrimeo o fatiga visual, te recomendamos que pidas cita con tu oftalmólogo de confianza, para que te realice una exploración ocular, evalúe el estado de la enfermedad en caso necesario y te prescriba el tratamiento más adecuado a tu situación.

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