Encontrar las lentillas ideales para tus ojos
Te contamos cuál es el proceso de adaptación que llevarás a cabo junto al contactólogo para encontrar tus lentes de contacto ideales.
Primer paso: ¿Cuáles son tus objetivos y expectativas con las lentes de contacto?
Si acudes a ICO con interés en usar lentillas, te derivaremos a la Unidad de Contactología Avanzada, donde el contactólogo conversará contigo para conocer qué buscas y qué esperas del uso de las lentes de contacto. ¿Las quieres para hacer deporte? ¿Para uso diario? ¿Para eventos puntuales? Además, recabará más información, como, por ejemplo, si ya habías usado lentillas antes.
Segundo paso: El contactólogo determina la mejor opción para ti.
¿Sabías que existen diversos tipos de lentes de contacto? Hay, entre otras, lentes blandas, lentes gas-permeable, lentes híbridas, esclerales y de ortoqueratología. Por ello, para seleccionar qué opción es la más adecuada para tus ojos, el contactólogo estudia los datos clínicos (como la graduación, los parámetros de la topografía corneal, la cantidad y calidad lagrimal) y la información recabada durante la primera visita.
A veces, el profesional considera que hay varios tipos de lentes de contacto que podrían ajustarse a tu caso. De ser así, te recomendará empezar por uno u otro tipo. Este momento es clave, define el plan de adaptación que deberás seguir a partir de entonces. Ambos, el contactólogo y tú, marcaréis un plan de ruta a seguir.
Tercer paso: Primeras pruebas en consulta.
En gabinete, bajo la supervisión del contactólogo, probarás diversas lentes. Tras dichas pruebas en consulta el profesional valorará si la lente probada es la correcta y si se confirman los tres requisitos que toda lente debe cumplir: ha de ser cómoda, tiene que proporcionarte una buena visión y no debe producirte daños oculares.
Cuarto paso: Aprender a usar las lentes y a mantenerlas limpias.
Las lentes no se pueden colocar ni retirar de cualquier manera. El contactólogo te enseñará a manipularlas adecuadamente. También te dará unas instrucciones básicas de seguridad. Por ejemplo, no deberías dormir nunca con las lentillas puestas y es de suma importancia que examines las lentillas para asegurar que no están dañadas antes de ponértelas.
También te explicará detalladamente los procedimientos de limpieza y desinfección. ¿Sabías que debes lavarte las manos con jabón antes de tocar las lentillas? ¿O que si te duchas con lentes de contacto existe el riesgo de contaminación por agua?
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Quinto paso: Usar las lentillas en casa y hacer un último control.
Es hora de probar las lentillas en tu rutina: en casa, en el trabajo, en horas de ocio o deporte. Te llevarás también unas soluciones de mantenimiento compatibles con el tipo de lentillas que usas. Ten en cuenta que una lente correcta con una solución de mantenimiento incorrecta puede hacer que la adaptación no funcione.
Tras haberlas llevado puestas durante toda una jornada, o durante las horas que te indicó el contactólogo, deberás regresar a consulta para realizar un último control. El contactólogo confirmará si las lentillas que has probado cumplen tus expectativas y se ajustan a tu fisiología corneal durante las horas que han estado en tus ojos.
¿Eres candidat@ a las lentillas?
Si quieres dejar de llevar gafas y las lentes de contacto pueden ser una buena opción para ti, en ICO contamos con una Unidad de Contactología formada por profesionales que te ayudarán a encontrar el sistema que más se ajuste a tus objetivos, respetando siempre la salud ocular. Consúltanos sin compromiso.