Enfermería quirúrgica, una profesión de constante formación y trabajo en equipo.
La importante función del equipo de Enfermería quirúrgica. Profesionalidad, vocación, formación contínua y trabajo en equipo.
Detrás de cada cirugía oftalmológica que llevamos a cabo en CEM, hay un equipo humano que, con vocación y esfuerzo, trabaja para alcanzar un objetivo: exigencia y calidad en la experiencia del paciente en quirófano, y por supuesto, en los resultados de la cirugía.
Junto al equipo de Cirujanas/os oftalmológicos y Anestesiología, trabaja el personal de Enfermería Quirúrgica. Este equipo polivalente formado por enfermeras/os y auxiliares de enfermería es fundamental. Con la atención puesta en cada detalle del quirófano, cuida del bienestar del paciente y asegura las condiciones óptimas para que la cirujana/o ocular se ocupe únicamente de operar.
Marta Calle, la Supervisora de los quirófanos de CEM, nos cuenta más sobre las múltiples funciones de este equipo de profesionales. Las podemos dividir en cuatro grupos:
1) Enfermera/o de anestesia: colaboración con anestesiología
Antes de entrar al quirófano, el paciente es acompañado por Atención al Cliente a los vestuarios, donde se le facilita un atuendo adecuado. Después se recostará en una camilla y pasará a la zona llamada Preanestesia.
En esta fase, una enfermera/o especializada colabora con la anestesióloga/o, preparando al paciente en la camilla y asegurando que esté tranquilo mientras se inicia la sedación. Marta Calle explica, “…el paciente nunca está solo, está bajo supervisión desde que entra por la puerta de toda la zona quirúrgica de la mano de Atención al Paciente, hasta su salida”.
Concluída la intervención, el paciente volverá a esta zona del espacio quirúrgico, en la parte conocida como Recuperación Anestésica. Allí también el trabajo de enfermería es de gran importancia para controlar ese proceso en tándem con la anestesióloga/o.
2) Circulantes: con la atención puesta en cada detalle del quirófano
Las/los circulantes deben tener los ojos muy abiertos y prestar constante atención a la actividad que ocurre en quirófano. En general, deben responder a cualquier incidencia que surja, vigilando estrechamente al paciente y a todos los instrumentos que participan en el proceso quirúrgico, desde la monitorización de anestesia como los aparatos que asisten la cirugía, sea de catarata, de retina, o de cualquier otra especialidad.
Estos profesionales tienen la responsabilidad de montar todo lo necesario para efectuar la operación y tener el material preparado para la/el instrumentista, además de adelantarse a sus necesidades.
También se encargan de asegurar que el paciente se sienta acompañado en todo momento, y que esté cómodo, caliente, seguro y tranquilo. Marta Calle explica “…aunque las cirugías oftalmológicas suelen ser breves, procuramos que ese tiempo que se está en quirófano sea agradable y reconfortante”.
3) Instrumentista: adelantarse a las peticiones de la cirujana/o
La instrumentación quirúrgica consiste en facilitar el instrumental adecuado a la cirujana/o durante la cirugía. No solamente se trata de dar el instrumental que piden, sino de anticiparse y tenerlo preparado incluso antes de que se haya pedido. Para ello, deben dominarse todos los tipos de cirugías, lo cual se consigue mediante una formación constante. Marta Calle comparte “… ser quirofanista es vocacional. Requiere formarse constante y desinteresadamente”. Además, el equipo quirúrgico conoce las preferencias y hábitos de la cirujana/o, lo cual facilita adelantarse a sus peticiones. Al instrumentar con eficacia, se reduce el tiempo de la intervención, se eliminan complicaciones y se reduce la fatiga del cirujano o cirujana. Una buena instrumentación hace que la experiencia quirúrgica sea algo extraordinario para todos los que comparten ese espacio tan tecnológico y de tanta intensidad humana.
En la cirugía oftalmológica de CEM, el equipo de Enfermería quirúrgica, además de instrumentar, también ayuda al cirujano o cirujana en determinadas maniobras.
4) Esterilización del material quirúrgico: limpieza, desinfección y esterilización.
Los instrumentos utilizados se llevan a la sala de esterilización, donde el equipo de enfermería quirúrgica esteriliza el material para la cirugía siguiente. La higiene en el quirófano es básica, por lo que hay una serie de normas.
- Está prohibido: llevar colgantes, pendientes o anillos.
- Es obligatorio: recogerse el pelo bajo el gorro de quirófano, así como llevar las uñas cortas y sin pintar y llevar correctamente la mascarilla, para evitar infecciones.
En este punto, también cabe destacar el papel del equipo de limpieza, que se encarga de limpiar y desinfectar los quirófanos.
Tres claves para quirófano: comunicación, silencio y trabajo en equipo
Ya que en quirófano ocurren múltiples acciones simultáneamente, debe mantenerse una coordinación estricta y eficiente. Aquí, la comunicación es esencial: el equipo de enfermería quirúrgica trabaja con radioauriculares (micrófonos que facilitan la comunicación directa entre profesionales), conectados además al equipo de Atención al Paciente que trabaja fuera de quirófano, en la recepción y en las salas de espera. De esta forma, se logra una coordinación casi impecable, y se trabaja con ritmo y calidad.
Es importante comunicarse de la manera más efectiva posible. En quirófano se necesita tranquilidad y seguridad, ya sea con música o con silencio, para mantener la concentración.
Como nos cuenta Marta Calle, “todas las funciones desempeñadas en quirófano son importantes. Es una cadena en la que no puede fallar ningún eslabón”. Se trabaja mano a mano y en equipo, con la confianza de que si surge una adversidad se puede contar con la ayuda inmediata del equipo.
En los quirófanos de CEM, uno de los mayores elogios que se escuchan cuando recibimos la visita de un observador sanitario es que han comprobado que casi nadie habla pero, que con breves y dirigidas miradas, los profesionales actúan de manera coordinada y eficaz para que el proceso quirúrgico sea automático, preciso y fluído. Si a ello añadimos el factor humano, la atención por el paciente y su estado emocional, podemos conseguir que la experiencia quirúrgica sea inmejorable.
Desde VERTE Oftalmología Barcelona queremos reconocer la labor del equipo de enfermería quirúrgica en CEM. Sabemos que su función es clave para el correcto desarrollo de una cirugía eficiente y de calidad, que vela por el bienestar del paciente.
Muchas gracias a tod@s por vuestra profesionalidad, rigor y eficacia.