Asistente de retina

Como pacientes estamos acostumbrados a que a menudo el especialista esté acompañado por un asistente que le ayuda en su labor diaria. ¿Sabemos por qué es importante el papel que desempeña el asistente en la consulta del oftalmólogo? Esta figura silenciosa es el primer contacto que tiene el paciente con el profesional y sirve de apoyo tanto para el paciente como para el médico.

Hoy conversamos con Manuel Daza, asistente del Dr. Ignacio Vela, desde 2019, para que nos cuente en qué consiste su trabajo y por qué consideramos esencial esta figura dentro de la Unidad de Retina y Vítreo.

¿Qué enfermedades trata el retinólogo?

En la Unidad de Retina y Vítreo, el retinólogo es el encargado de tratar enfermedades frecuentes y graves para la visión que afectan la retina, el vítreo y la mácula, como, por ejemplo, la retinopatía diabética, la degeneración macular asociada a la edad (DMAE) o el desprendimiento de la retina, entre otras.

Para poder detectar y hacer el seguimiento de estas patologías, el especialista de retina instila en el ojo unas gotas para dilatar las pupilas y poder hacer un examen completo y detallado de la retina y del interior del ojo.

Manuel, ¿de dónde nace la necesidad de tener un asistente de retina?

El papel del asistente de retina consiste en proporcionar apoyo al equipo de vítreo-retina, encargándose de realizar la valoración y preparación previa a la visita con el oftalmólogo. Esta figura nace de la necesidad de proporcionar dos manos más al especialista, ahorrando tiempo al profesional y aumentando el doble la atención al paciente. El asistente también hace una gestión de las agendas en cuánto a las esperas y además tiene la función de informar, asesorar y gestionar las dudas urgentes e importantes del paciente en el caso de que sea necesario.

¿Qué formación profesional tienes para trabajar como asistente del retinólogo?

Soy enfermero graduado en Venezuela y me especialicé como Practicante de Médico de Retina en el Reino Unido.

¿Qué funciones debes desempeñar como asistente con cada paciente que entra en la consulta?

Para realizar la valoración y la preparación del paciente antes de la visita con el oftalmólogo utilizamos un algoritmo básico, que representa los pasos básicos que tenemos que seguir con cada paciente. Este proceso puede variar según la razón de la visita, veamos cómo:

• Primero de todo preguntamos al paciente su historia clínica, antecedentes, síntomas, motivo de la consulta, etc.
• En segundo lugar, comprobamos su agudeza visual para tener la información de la máxima visión que puede alcanzar el paciente y, por tanto, el mínimo detalle que es capaz de discernir con la graduación correctamente ajustada.
• Seguidamente, hacemos una medición con el autorefractor, un instrumento que calcula la capacidad de enfoque de los ojos e indica un valor aproximado de las dioptrías de miopía, hipermetropía y astigmatismo que poseen los ojos.
• En el caso de que el paciente tenga un defecto refractivo y tenga la necesidad de usar gafas, hacemos una medición de la graduación de la que disponen sus gafas.
• Después procedemos a comprobar la presión intraocular del ojo.
• Y finalmente instilamos al paciente unas gotas para dilatar la pupila para que el especialista le pueda examinar el fondo del ojo.

Generalmente, con la mayoría de los pacientes que vienen a control ya contamos con toda su información como, por ejemplo, el motivo de la visita, si tienen alguna alergia, si están siguiendo algún tratamiento, entre otros. Además, si procede, contamos también con el resultado de las pruebas oportunas para realizar su control. Por este motivo, no siempre se realizan las mismas pruebas a todos los pacientes, ya que pueden cambiar en función del histórico y de los requerimientos médicos.

¿Qué papel tiene el asistente en el paciente postoperado?

Además del proceso que realizamos al paciente de control, se le informa de los cuidados y tratamientos postoperatorios.

El asistente de retina es imprescindible, ¿por qué?

Sí, porque de esta manera los pacientes reciben un trato más eficiente y se reducen las esperas. La visita de retina es laboriosa porque en la casi totalidad de los casos, hay que atender al paciente antes de dilatarle las pupilas y después. De no ser así, cada paciente tendría que esperar para la valoración inicial y para que el oftalmólogo le instilara las gotas. Después tendría que esperar de nuevo a que la dilatación hiciera efecto para la valoración del fondo de ojo.

¿Qué cualidades crees que son las necesarias para ser un buen asistente?

Evidentemente se ha de tener buenos conocimientos oftalmológicos y técnicos. Además, es esencial que un buen asistente tenga habilidades comunicativas y fluidez verbal para establecer una buena comunicación con el paciente, pero también es muy importante que tenga un grado elevado de empatía, ya que su función también es escuchar al paciente, explicarle todo el proceso, acompañarle y aclararle cualquier duda que pueda tener.

¿Crees que el paciente desarrolla un vínculo de confianza con el asistente?

¡Si! Puesto que son los asistentes de retina los primeros en escuchar al paciente y, por tanto, siempre estamos al caso de su situación, les hacemos un seguimiento y lo transmitimos al especialista.

¿Qué es lo que más te gusta de hacer de asistente de retina?

Lo que más me gusta es poder desarrollar la carrera de enfermero especializado en patología oftalmológica y optometría en el área clínica y poder tener contacto directo con el paciente.

¿Qué consejo le darías a nuestros pacientes?

Yo les diría que es muy importante que se hagan revisiones oftalmológicas periódicas, especialmente los pacientes con un grado de miopía alta. Detectar enfermedades de forma precoz puede determinar su pronóstico y mejorar la calidad de vida del paciente, cosa que, como vemos en la consulta, es muy importante. También diría a todos aquellos pacientes con antecedentes familiares de Degeneración Macular (DMAE), Desprendimiento de Retina o diabetes que presten especial atención a su visión, y que, en caso de experimentar cambios, acudan al Servicio de Urgencias oftalmológicas 24h

Como hemos visto, el papel del asistente es un engranaje que encaja entre el paciente y el especialista. Su objetivo principal es velar por el paciente y asistir al oftalmólogo con lo que necesite, para poder ofrecer a nuestros pacientes un servicio más personalizado y atento.

Agradecemos a Manuel que nos haya introducido un poco más en su día a día como asistente de la Unidad de Retina y Vítreo y aprovechamos para recordarte que, si quieres seguir su consejo y hacerte una revisión oftalmológica completa, puedes contactar con nosotros llamando al 934 15 56 37 o enviando un WhatsApp AQUÍ.