El aceite de silicona es una sustancia útil y tóxica a la vez. Éste se utiliza principalmente en casos de desprendimiento de retina complejos y tiene que ser manejado por un cirujano de vitreo-retina experimentado.
Habitualmente a partir de los 6 meses el aceite de silicona puede empezar a producir problemas, principalmente aumento de la presión del ojo o problemas en la córnea. Además si el ojo tiene cristalino se puede producir catarata mucho más tempranamente.
En consecuencia si a los 6 meses ya ha hecho su función y la retina nos da seguridad de no volver a desprenderse, extraer la silicona es una buena decisión.
Sin embargo hay casos con riesgo elevado de redesprendimiento, ojos únicos (el otro ojo está ciego) u otras situaciones especiales, en que mantenemos esta sustancia de modo indefinido, vigilando estrechamente el paciente para diagnosticar los problemas de toxicidad a tiempo y decidir su extracción. Tenemos pacientes con aceite de silicona durante años pero también hemos tenido otros muchos que ha sido necesaria su extracción asumiendo los riesgos de nuevas complicaciones en la retina.